El guante exfoliante permite una limpieza más profunda de la piel eliminando las células muertas, por lo que la piel luce suave, luminosa y renovada.
Modo de empleo
Una vez en la ducha, con la piel humedecida preferiblemente con agua templada, realizamos masajes ascendentes y descendentes con el guante. Empezando por los brazos, tronco y al final las piernas. Damos varias pasadas y luego nos enjuagamos.
Se aconseja empezar por el masaje antes de lavarse el cabello y de enjuagarse con jabón, para que la exfoliación se lleve a cabo de forma exitosa.
Se desaconseja su uso en pieles acnéicas para evitar la sobreinfección.
Nota: Puede que el color del guante no corresponda con el de la imagen.
V. –
Me resulta muy práctico, por su tejido se adhiere muy bien a la mano en el momento de utilizarlo, no como otros que he probado, en este aspecto me he llevado una grata sorpresa. Después de su utilización la piel se queda lisa y luminosa.